Muchas personas me preguntan por qué les cuesta tanto ganar volumen, por qué otra persona tiene una base mucho más musculada sin haber hecho nada o por qué en cuanto se descuidan engordan rápidamente. Estoy cansada de que las revistas se limiten a hacer simples comparaciones con cuerpos peras, manzanas, relojes de arena, torres, que si tienes los hombros igual que tu cadera, que si tu cintura es más ancha que… ¡VALE YA!

     Además de la dieta y el entrenamiento existe otro factor fundamental, tu BIOTIPO O SOMATOTIPO. 

Existen tres tipos somáticos:

     ECTOMORFO: Es la persona delgada por naturaleza, suelen tener dificultad para ganar masa muscular y al tener un metabolismo bastante acelerado no predomina el tejido adiposo. No suelen necesitar suplementos como termogénicos, sin embargo los ganadores de peso si son bienvenidos. 

     MESOMORFO: Predominan los músculos sobre el tejido adiposo, reconocerás a estas personas por sus hombros anchos y cintura estrecha, es decir, su figura atlética (cuerpo en “V” en hombres y “8” en mujeres). Ganan volumen con cierta facilidad aunque deben prestar atención al trabajo cardiovascular y a la dieta.

     ENDOMORFO: Se caracterizan por tener una gran cintura y caderas anchas. Son las personas que tienden a subir de peso muscular con facilidad pero también ganando masa grasa. Para eliminar la grasa deben hacer uso de suplementos además de un buen trabajo aeróbico, y seguir dieta estrictamente.

     Todos pertenecemos a uno de estos tipos, o una mezcla de dos. Por eso cada cuerpo parte de una base diferente, necesita ser tratado de forma individual y reacciona de forma distinta a un mismo plan de entrenamiento y nutrición. 

     ¿Cual es tu somatotipo?